domingo, 31 de mayo de 2009

¿Cómo se siente la infancia?

La infancia es un pasillo largo; una puerta entreabierta al fondo. Es caminar de puntillas y asomarse con sigilo y quedarse con cara de tonto al ver decenas de regalos y juguetes que han traído los reyes magos.
La infancia sabe a polo de hielo, de cincuenta pesetas, de naranja, muy frío; que se te pega a la lengua y se te empieza a derretir luego, y te caen churretones por la barbilla y mamá te dice que te vas a manchar la camiseta.
La infancia es la arena que aún pica en los ojos; que se te pega en el cuerpo y brillan los puntitos de sal en la piel tostada, en el castillo de arena, en el cubo, en la pala...
La infancia suena al tac-tac-tac de un tenedor contra la loza de un plato desconchado. Son las nueve de la noche; patio de vecinos; las madres hacen tortillas.
La infancia huele al armario de la abuela; a bolas de naftalina y ropa vieja. A perfume. A seda y telas suaves; a misteriosos recuerdos.

1 comentario:

javi freire dijo...

bua, bua... me había olvidado de todo eso, que viejo soy...